La iglesia de San Román (también conocida como de San Román y Santa Catalina) de Sevilla es uno de los templos más antiguos de la ciudad, pues data del año 1356. Se trata de una de las veinticuatro parroquias en las que quedó dividida Sevilla tras ser reconquistada en el año 1248 por el rey Fernando III "El Santo". Por sus características y tipología constructivas pertenece al interesante grupo de las iglesias gótico-mudéjares de esta ciudad.
Restaurada en 1948, a partir de 1991 fue sometida una vez más a nuevas restauraciones siendo abierta de nuevo al culto en el año 2004 tras una rehabilitación integral que ha llevado incluso a dejar al descubierto su portada lateral a la calle Enladrillada, antes oculta tras una edificación sin interés y que por ello fue eliminada.
El palacio de las Dueñas fue levantado entre los siglos XV y XVI, de estilos gótico-mudéjar al renacentista. Pertenece en propiedad a la Casa de Alba.
El palacio de Las Dueñas fue fundado por la familia Pineda, quienes lo tuvieron que vender en el año 1484 a Catalina de Ribera por necesidades acuciantes de dinero: debían pagar un rescate por don Juan de Pineda, hecho prisionero por los moros.El inmueble pasó a ser propiedad de la Casa de Alba tras el matrimonio de la IV marquesa de Villanueva del Río, Antonia Enríquez de Ribera Portocarrero, quien fue la primera esposa del IV duque de Alba, Fernando Álvarez de Toledo y Mendoza.
Su nombre se debe al monasterio de Santa María de las Dueñas, que en 1248 se conocía como Compañía de Dueñas y cuyas monjas se encargaban de dar servicio a reinas y esposas de los reyes de Castilla San Fernando y Alfonso X el Sabio
En el muro de entrada al palacio de Las Dueñas, una placa indica que en una de las dependencias que alquiló el administrador del duque a los padres de Antonio Machado, nació y vivió su infancia el poeta, y así lo plasma en uno de sus escritos:
Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,
y un huerto claro donde madura el limonero;
mi juventud, veinte años en tierras de Castilla;
mi historia, algunos casos que recordar no quiero.